Wilson de la Barra ha estado 40 de sus 53 años en la hípica. «Llegué por mi tío Wilson Robles», confiesa. Eterno cuidador y hoy capataz del trainer líder Sergio Inda, De La Barra -quien galopó y corrió una vez en Laurel Park, Estados Unidos- describe el complejo momento del gremio y el estado de los F.S. tras cuatro meses de para:
«Han sido meses duros. Los cuidadores y capataces no tenemos mayores recursos, pero seguimos poniéndole el hombro. Ya no están los porcentajes de los premios ni las llevadas y los patrones no pueden venir a los establos. A la mayoría no nos ha llegado cajas ni plata. La hípica no es solo carreras, sino un gran trabajo interno y con mucha gente. Algunos no lo saben. Vivo en el corral y a las 7 am ya estoy en pie. Las mañanas han sido heladas y se sienten dos grados bajo cero cuando galopo. Los caballos están más inquietos que antes y quieren puro correr. Tenemos que prevenir cólicos, pero no han perdido training y están diez puntos para correr. En mi corral viven Del Bosque, Nantán Lupán, El Mero Mero y Bicampeón Chileno, entre otros»
Quien fuera cuidador de los clasiqueros El Merito y Antauro agradece a sus patrones: «Sergio Inda se ha portado muy bien con nosotros y trabaja 200 caballos entre viernes y sábado. Gracias a propietarios como mi papi Mero Mero y otros porque sin ellos tendríamos menos trabajo. No todos piensan igual y algunos han mandado sus caballos al campo. Soy un agradecido de los caballos. En Estados Unidos fui galopador y un día me saqué la espina y corrí en Laurel Park. Fue un sueño. Gracias también al trainer Claudio González, una gran persona y metido 1000% en su pega» dijo a #Vamosalahípica. (📸 Wilson de la Barra)
Un angustioso triunfo obtuvo de reaparecida el campeón Maximum Security (New Year’s Day), debutando en manos del trainer Bob Baffert. El mejor F.S. del último año en Estados Unidos venció por nariz al puntero Midcourt en el G2 San Diego Hándicap (1.700m) por US$ 150.000 en Del Mar. El jockey Abel Cedillo, quien reemplazó a Luis Sáez por su positivo por Covid-19, tuvo que estirarse a fondo para salvar el estreno del crack en California.
«Es un caballo asombroso. Puedes hacer lo que quieras con él, venir despacio o de inmediato» confesó Cedillo. Pese a que venía de ganar la prueba mejor rentada del orbe, la Saudí Cup por US$ 20.000.000, la polémica ha acompañado a Maximum Security en su campaña. Desde su demoledor debut en una carrera barata de reclamo en Gulfstream Park, pasando por su descalificación del primer al 17° lugar en el G1 Kentucky Derby, hasta el arresto de su formador Jason Servis por cargos de fabricación y administración de medicamentos adulterados. Con US$ 11.891.900 en premios y nueve triunfos (diez en pista) en sólo once presentaciones, Maximum Security seguirá escribiendo nuevos capítulos, quizás para buscar el récord mundial por sumas ganadas ¿Qué te pareció su reaparecida?