Maritza Pérez es una de las pocas mujeres que ejerce como capataz en la hípica chilena. Tras haber trabajado con Mocito Guapo y Alejandro Padovani, hoy es brazo derecho de Haras Sumaya: «Llevo 24 años en la hípica. Vengo de familia humilde y debí trabajar para poder sostenerme. Mi abuela dio todo por nosotros. Partí trabajando con don Rafael Quiroz y me costó por ser mujer, pero demostré que podía. Cuando mi hija tenía dos años, me mudé a Independencia. Donde Valentín Ubilla cuidé a Pin Draff. Fui capataz de don Alejandro Padovani y luego de Mocito Guapo, una maravillosa experiencia. La señora Teresa Solari es una gran persona. Ganamos muchas carreras. La yegua Tan Yi era muy difícil de carácter. No dejaba que la tocaran, pero le fuimos dando confianza. Todos los empleadores me han enseñado. Hoy estoy con Sumaya y agradecida. Es muy agradable trabajar con Marco Pavez. No me arrepiento del camino recorrido. Gracias a este trabajo he obtenido gran parte de lo que tengo», confesó a #Vamosalahipica.